OPINIÓN. Por Juan Reginato

“Clarín miente” afirma el compañero.

Clarín: “Alberto Fernández habló con Cristina Kirchner, que impuso a Silvina Batakis como ministra de Economía”

El compañero: “¡¡¡Movió la Reina!!!, ¡¡¡grande Cristina!!!, Ahora vamos por Pesce!!”

La secuencia es real y tragicómica. Este ´no-logismo´ lo vemos repetido a diario en muchos compañeros y compañeras y lo que es peor en los medios que tratan de ser oficialistas mientras dan por válidas las operaciones de la oposición y a las cuales buscan darle otra interpretación.

La realidad, bien gracias.

Vamos al punto: ¿Clarín miente? Sí. Miente, opera, extorsiona, aprieta, condiciona. Lo que mejor hace es tomar algo de la realidad, tunearla y difundirla hasta convertir en verdad irrefutable la versión de los hechos que mejor represente sus intereses. Si hay algún dato bien, sino no importa.
Cuando Clarín dice “Cristina le impuso la ministra de Economía a Alberto” está haciendo una lectura adecuada a sus intereses de la realidad: limar a Alberto es el principal objetivo que tiene para imponer su proyecto de exclusión, miseria y represión porque limando a Alberto lima al conjunto. Los piolines se siguen cortando en su parte más fina. Para ello le asigna a Cristina un rol que no tuvo y de paso la estigmatiza. Hasta allí todo esperable, nuestros enemigos son poderosos y no tienen escrúpulos.

Algunos compañeros y compañeras por alguna extraña razón dan por cierta esa versión, la reafirman y terminan siendo funcionales: con orgullo dicen “Ya se cargó a Kulfas, ahora a Guzmán que era un enviado del imperialismo, la ministra es de Cristina, Alberto es (ponga el adjetivo des-calificativo que se le ocurra)” y así van inundando de mierda los escasos espacios de comunicación que tiene el proyecto nacional. En lugar de fortalecer el piolín en su trayecto más fino le sacan hebras.

Lo más probable es que la presencia de Batakis en el gabinete nacional sea por obra y gracia de los gobernadores, quienes conforman un conjunto de poder que no se ha mostrado particularmente enfrentado con Alberto Fernandez y que además valoran el crecimiento económico y pretenden mantener las obras que se ejecutan en sus provincias. Con ese apoyo previo se buscó el acuerdo con Cristina y de esa manera se preservó el poder presidencial, ya de por sí magullado por los muy propios, propios y ajenos.
Entonces la tarea para los compañeros y compañeras que estamos en el llano es, me parece a mí, bancar la gestión de Batakis a como dé lugar asumiendo que en muchos aspectos continuará lo iniciado por Guzmán. Para ello hará falta meterse las críticas que solo buscan romper, los memes ridiculizantes, las remeras, las lapiceras, la prepotencia, las agachadas, las chanzas, los ninguneos, etc., etc. en el fondo de las prioridades y dedicarnos a ponderar los avances que tiene nuestro gobierno en distintas áreas, así de paso evitamos caer en la tentación de discutir y difundir la agenda de los que nos operan. Y escuchar los consejos de Estela, si de verdad nos importa algo lo que le pasa a nuestro pueblo.

Más Estela y menos Borroni, por ejemplo, sería una buena síntesis.